Mito 2: me completas
Si vives este mito y actúas como si estuvieses incompleto sin tu pareja, te estás preparando para todo tipo de problemas. Serás una persona necesitada, dependiente, y temerosa de estar sola, lo cual no es propicio para una vida sana, y una relación vital. Afortunadamente puedes descubrir que ya estás completo, independientemente de si tienes una pareja o no. Por supuesto, tu mente no estará de acuerdo con esto. Puesto que todos somos altamente auto críticos, y parecemos deleitarnos al decirnos lo incompletos que somos. Pero a pesar de lo que tu mente pueda protestar, si trabajas la conciencia y la atención plena y la acción consiente podrás experimentar un sentido de totalidad e integridad dentro de ti mismo que es independiente de cualquier otra persona. Esto te permitirá ser más fiel a ti mismo en tu relación: es decir podrás expresarte honestamente, pedir lo que necesitas, y defenderte, sin freno por miedo al rechazo o al abandono.
Mito 3: el amor debe ser fácil
Cuando vives íntimamente por un largo período de tiempo con otra persona que tiene (a) diferentes pensamientos y sentimientos, (b) diferentes intereses, (c) expectativas diferentes sobre trabajo de casa, sexo, dinero,religión, paternidad, vacaciones, equilibrio entre el trabajo y la vida privada, y tiempo de calidad, (d) diferentes estilos para comunicarse, negociar y expresarse, (e) diferentes reacciones a las cosas que disfrutas o temes o detestas, (f) diferentes impulsos para la alimentación, el sexo, el deporte, el juego y el trabajo, (g) diferentes normas de limpieza, (h) amigos y familiares que no recibes demasiado bien, (i) hábitos y rarezas profundamente arraigados que molestan … ¿debería ser fácil?
¿Te suena convincente?
Por supuesto, nuestras mentes se apresuran a señalar que si nuestras parejas fuesen más compatibles, si no tuviesen tantas diferencias con nosotros, entonces nuestras relaciones serían mucho más fáciles. Buen punto, pero ahora estamos de vuelta al mito 1: el compañero perfecto. El hecho es que siempre habrá diferencias significativas, en algunas o todas las áreas mencionadas aquí y también en muchas otras. Por eso las relaciones no son fáciles. Requieren comunicación, negociación, compromiso, y una gran aceptación de las diferencias; también requieren que te levantes por ti mismo, para ser honesto acerca de tus deseos y tus sentimientos, y en algunas situaciones, cuando algo de vital importancia para tu salud y bienestar está en juego: para negarse totalmente a un compromiso. Esto es un desafío. Pero mientras esperas que tu pareja piense, sienta y actúe como tu, te estás preparando para la decepción y frustración.
No podemos negarlo, algunas parejas tienen más en común que otras. Algunas parejas son naturalmente optimistas, tranquilas y fáciles de llevar. Algunas parejas tienen excelentes habilidades de comunicación. Algunas parejas tienen intereses muy similares. Y seamos realistas, si ambos comparten las mismas pasiones deportivas o de entretención, es mucho más fácil acordar planes de vacaciones. Pero no importa cuánto tengas en común, siempre habrá diferencias que te desafían.
Tarea: La terapia ACT se centra mucho en la aceptación. Y debes aprende a aceptar verdaderamente las diferencias de tu pareja, encontrarás que tu frustración, resentimiento o enojo comienzan a disolverse para que pueda disfrutar de los muchos placeres que una relación sana puede darte.
Nota: Un pequeño recordatorio: “aceptación” no es la única palabra importante en ACT ; también existe la palabra “compromiso”, es decir la acción para mejorar tu relación.
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